Испания заработает на новых резидентах

Как сообщает газета «АВС», министр труда Хесус Кальдера объявил, что в 2006 году иммигранты выплатят в пенсионный фонд Испании 1.35 млрд евро, что составит сумму почти вдвое большую, чем в 2005 году, когда было собрано 0.75 млрд евро.

При этом, как отмечают представители крупнейшего испанского профсоюза «Рабочие комиссии» (ССОО), только 5% иностранцев, которые легализовали свой статус в результате прошедшей амнистии, получили постоянный контракт. Остальные напряженно думают о своей первой выплате налогов. За большинство платят их компании, а приблизительно треть из легализовавшихся платят налог не через свой банковский счет.

Los inmigrantes aportarán a la Seguridad Social 1.350 millones por cuotas en 2006

El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, destacó ayer la aportación de los inmigrantes al sistema público de pensiones, ante el envejecimiento de la población

MAITE VÁZQUEZ DEL RÍO

MADRID. El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, confirmó ayer que la aportación de los inmigrantes al Sistema de la Seguridad Social se situará en torno a los 1.350 millones en 2006 a través de las cotizaciones que aportarán estos trabajadores, una cifra que casi duplica los registros del pasado ejercicio en que se contabilizaron 750 millones.

Caldera, que participó ayer en el Foro Nueva Economía, organizado por la Fundación Once y la Fundación Pfeizer, constató que el proceso de regularización de inmigrantes realizado el pasado año supuso la legalización de 556.000 trabajadores extranjeros, en su mayoría adscritos al Régimen General de la Seguridad Social, si bien, también se han dado de alta en otros regímenes especiales como el Agrario o el de Trabajadores Autónomos.

Ante estos datos, Caldera aseguró que dicho proceso de regularización ha tenido «importantes consecuencias económicas», al tiempo que reconoció que los datos «han mejorado las expectativas iniciales».

El sistema público de pensiones que en la actualidad goza de una buena salud financiera, con un superávit previsto hasta 2015, se ve favorecido por la aportación de los inmigrantes, subrayó Caldera.

También reflexionó sobre la evolución del número de pensionistas en los próximos años, confirmando que en 2005 se registró uno de los menores incrementos de jubilados del sistema público, al alcanzar la edad de jubilación aquellos trabajadores nacidos en la postguerra: «En 2005 se registró el menor incremento de jubilaciones del siglo XX», afirmó el ministro, quien destacó, sin embargo, que al mismo tiempo se produjo una «explosión» en la ocupación, al registrar la Seguridad Social 960.000 cotizantes más.

Unos 2,7 cotizantes por cada jubilado

De esta forma -continuó explicando el ministro-, por cada pensionista hay casi 2,7 cotizantes, un ratio de los más elevados de toda la Unión Europea, que vendría a confirmar que el sistema público español se encuentra en uno de sus mejores momentos financieros. En este contexto, los flujos de inmigrantes vendrían a favorecer aún más la situación.

«Las amenazas de un envejecimiento drástico de la población española hay que ponerlas en almoneda», enfatizó el titular de Trabajo. No obstante, llamó a la reflexión porque hay que seguir buscando fórmulas que garanticen el sistema en el futuro.

Entre las propuestas que se están negociando en la mesa de reforma el sistema de pensiones, Caldera recordó la apuesta del Gobierno por prolongar la vida laboral más allá de los 65 años. Para ello -explicó- se deberá estimular a los trabajadores que sigan trabajando a partir de esa edad con una mejora de su pensión.

Caldera aseguró que no habrá problemas para pagar las pensiones hasta 2015 o 2020, tal y como se financia en la actualidad el sistema. Si no se introduce ningún cambio, empezará a haber déficit, al ser mayor el gasto que los ingresos del sistema público. Sin embargo, estas previsiones no han tenido en cuenta el flujo de inmigrantes ni los más de 450.000 empleos que creará el sistema de dependencia para la atención de mayores o dependientes.

Aún no hay estimaciones de gasto

Además, como explicó ayer el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, todavía no existe ninguna estimación sobre el coste de la pensión de los inmigrantes que se jubilen en España. Falta por conocer cuántos de estos inmigrantes se quedarán en nuestro país y cuántos regresarán.

Los cálculos del Gobierno español son que por cada año que haya cotizado el trabajador extranjero cobre en el peor de los casos (con tan sólo 15 años de cotización, el mínimo exigido para tener derecho a percibir una pensión) el 3,3% del total de la pensión.

En este sentido, Granado recordó que España ya ha firmado convenios de colaboración con 18 países iberoamericanos, además de Marruecos. Dichos convenios suponen que cada país aporta la parte de la pensión por la que el trabajador ha cotizado, según los años cotizados.

Хорхе Костас